Eventos Científicos: herramientas de gestión para la socialización de resultados de ciencia.
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Vol. 12 No. 2, ISSN 1390-9789, agosto, 2024
INTRODUCCIÓN
El fomento y desarrollo de la investigación es uno de los ejes fundamentales de la actividad
universitaria, siendo la difusión de sus resultados un elemento relevante en esta actividad. El objetivo
principal de un evento científico es precisamente la divulgación de los resultados de investigación. La
concepción de esta actividad parte de la necesidad de compartir el conocimiento asociado a resultados
científicos, con un respaldo de líderes científicos asociados al objetivo del evento, publicaciones y
avales que garanticen el éxito del mismo. Además, un evento científico puede potenciar la visibilidad
de la Universidad en el contexto nacional e internacional.
Sin embargo, no siempre la concepción, la planeación y el desarrollo de un evento científico tiene en
cuenta dicho objetivo principal. Independientemente de que el evento científico está dirigido por
definición a un público profesional, en el que además de hacer ciencia, se difunden o celebran los
resultados, es necesario buscar la creación de alianzas y la visibilidad, vender no solo el producto, sino
también la imagen y los atractivos de una ciudad, porque con ello los gobiernos territoriales también
pueden beneficiarse y brindar su apoyo.
En la Universidad de Oriente (UO) la experiencia en la práctica sistemática de la gestión de eventos
científicos ha evidenciado insuficiencias en la comprensión de la concepción y desarrollo de los mismos
en las diferentes áreas, lo que repercute en las dificultades que se afrontan para la gestión y desarrollo
de eventos internacionales de la institución como lo es por ejemplo la Convención “Ciencia y
Conciencia”, que llegara el próximo 2025 a su cuarta edición.
En este sentido, la gestión de eventos científicos requiere considerar pautas en el orden práctico y
metodológico que permitan resolver las insuficiencias manifiestas en aras de poder contribuir a la
socialización de los resultados científicos como parte del perfeccionamiento de la gestión de ciencia.
Varios trabajos de diferentes autores se refieren a la concepción, organización y desarrollo de eventos
que aportan significativamente a su compresión, entre los que pueden citarse el manual para organizar
y ejecutar un evento empresarial efectivo (Rojas, 2008), folleto para la organización de eventos
científicos (Lebeque, Brull y Díaz, 2017), el referido a direcciones metodológicas para la organización
de eventos científicos (Lebeque y Brull, 2018) y la metodología para la gestión de eventos científicos
en los centros universitarios municipales y su contribución al desarrollo local (Infante et al, 2018).
Estos trabajos y los de otros autores, que antecedieron a los ya mencionados (Blanco, 2000; Richero,
2004; Rivero 2005; González, 2007), constituyen guías, manuales, folletos, metodologías que orientan
sobre la organización, la planificación y el desarrollo de los eventos científicos, sin embargo, la práctica
evidencia la necesidad de promover mucho más este conocimiento. De ahí, que el objetivo del presente
trabajo se oriente a presentar pautas metodológicas para la gestión de los eventos científicos como
herramienta significativa para la socialización de los resultados de ciencia en la UO. Se aplicó una
metodología participativa que refiere que en los procesos interaprendizajes participativos y vivenciales
se promueva de manera integral el cambio de actitudes y la eliminación de prácticas que afectan el
desarrollo de las personas articulando tres momentos, partir de la práctica, la teorización y vuelta a la
práctica. Lo que permitió llegar a los resultados y aportes de la investigación revisión de documentos.
DESARROLLO
Identificación de la problemática. Metodología aplicada.
La necesidad de perfeccionar la gestión de eventos implicó que desde la misma práctica se fuera
identificando la problemática real, el conocimiento que sustenta dicha gestión y el desarrollo de una
práctica modificada a partir de la propuesta de nuevas y/o mejores formas de hacer. Para ello se
asume de la autora Flor Abarca Alpizar (1997) la metodología participativa, que refiere que en los
procesos interaprendizajes participativos y vivenciales se promueva de manera integral el cambio de
actitudes y la eliminación de prácticas que afectan el desarrollo de las personas articulando tres
momentos, partir de la práctica, la teorización y vuelta a la práctica.
Según la autora, partir de la práctica significa el reconocimiento y valoración de las experiencias y
conocimientos adquiridos por las personas como la forma de despertar el interés y la motivación
necesaria para el aprendizaje de nuevas formas. La teorización se refiere a la incorporación de nuevos
conocimientos por medio del diálogo y la reflexión colectiva, y la vuelta a la práctica tiene la intención
de promover la transformación de la realidad, mejorando, cambiando o transformando problemas,