Pequeños guardianes del planeta: integrando educación ambiental y desarrollo sostenible en la educación primaria
del entorno. Según el Informe Brundtland (1987), el desarrollo sostenible implica “satisfacer las
necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer sus
propias necesidades” (p. 41). Este principio es fundamental para orientar los procesos educativos hacia
una visión ética y preventiva del uso de los recursos naturales.
Demanda formar con valores, cualidades, aptitudes personales y una preocupación por el medio en que
vive y por los problemas relativos a los seres vivos, es una necesidad de estos tiempos y un contenido de
esencia del proceso docente educativo del Sistema Nacional de Educación de Cuba y los subsistemas
educativos cuyo fin es la formación de la nueva generación en la concepción científica del mundo basada
en los principios marxistas-leninistas, martianos-fidelistas en defender las ideas, la ética, los principios en
los que se cree, para desarrollar en toda su plenitud las capacidades intelectuales y espirituales en cada
individuo. Fomento de valores y costumbres en su actitud, modos de vidas, sentimientos, conductas y
cualidades. Cuyo objetivo a lograr es la formación de un hombre culto, digno, humano, lo que implica la
convivencia armoniosa con el medio ambiente.
La Educación Primaria como plataforma del Sistema educativo cubano en transformaciones profundas
establecidas en el Plan de Estudio de 2024, desde su fin plantea la necesidad de contribuir al desarrollo
de la personalidad a partir de la interiorización de conocimientos que permitan las orientaciones valorativas
que se revierta en sentimientos, valores, comportamientos a favor de la educación ambiental. Donde todas
las disciplinas del currículo deben favorecer de manera especial El mundo en que vivimos (EMQV). Esta
disciplina cuyo objeto de estudio es lo natural y social y la interrelación, entre ellos. Permite adquirir
conocimientos elementales acerca de la naturaleza y la sociedad. En esta disciplina, la principal fuente de
conocimientos, habilidades y actitudes, así como en la formación de valores, se armonicen las relaciones
entre los seres humanos y la naturaleza. Está en los propios objetos, fenómenos y procesos de la
naturaleza lo cual les proporciona un conocimiento empírico, ya que depende de las sensaciones,
percepciones y representaciones que se logran captar y formar en la práctica de la observación y el
experimento, de ahí que, en la disciplina “El mundo en que vivimos” de tercer grado, se aborda la educación
ambiental de acuerdo con los contenidos del nivel. Las Orientaciones Metodológicas indican que los
educandos deben comprender el concepto de naturaleza y reconocer sus diversos componentes, así como
las interrelaciones, cambios y transformaciones entre ellos. Esto es fundamental para desarrollar de
manera sistemática la capacidad de apreciar la belleza de la naturaleza y fomentar sentimientos de amor
y respeto hacia ella (MINED, 2001, p. 170).
Por lo tanto, en cada una de las unidades del programa de la disciplina de tercer grado, se abordan temas
que pueden fomentar actitudes positivas hacia el cuidado del medio ambiente. Sin embargo, no se
observan actividades específicas dedicadas a este tema, lo que subraya la necesidad de involucrar
activamente a los docentes en su preparación para tratar estos contenidos de manera efectiva. La
participación activa de los docentes es crucial para integrar de manera adecuada la educación ambiental
en el currículo en tal sentido, muchos han sido significativos los investigadores internacionales, nacionales
y territoriales que han abordado la temática relacionada con la educación ambiental y la ecología dado su
impacto en las sociedades desde proyectos de investigación, tesis de doctorado, maestrías, artículos
científicos, entre otros como: Grupo Nacional para la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo
Sostenible (2019); Guanche (2021); Crúz y Pulido (2021); Gutiérrez, (2022); Hernández (2022); Díaz,
Rubié y Bosque (2023); entre otros.
Sus aportes están encaminados a favorecer la educación ambiental y ecológica en las instituciones. Se
basan en la búsqueda de soluciones a esta problemática; al abordar los fundamentos teóricos y prácticos
relacionados que la sustenta, métodos y vías para su tratamiento a partir de estrategias pedagógicas.
Varias han sido las estrategias de integración interdisciplinaria, curricular, e institucional a los Programas,
Proyectos y buenas prácticas en las universidades, instituciones, familias y comunidades en Cuba, sin
embargo, aún se evidencian en la práctica pedagógica en la institución educativa José Rivero Sánchez del
municipio San Luis, Santiago de Cuba , carencias en la disciplina El mundo en que vivimos en los
conocimientos,, dominio de conceptos y fisuras en los comportamientos acordes de los educandos,
respecto al contenido desde el proceso de enseñanza aprendizaje en defensa del medio ambiente, como
espacio idóneo para dotar desde las primeras edades a los niños de los conocimientos, en primer lugar,
sobre el medio en que vive y en segundo, prepararlo para enfrentarlo y transformarlo, siempre con la
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Vol. 13 No.3, ISSN 1390-9789, diciembre, 2025